


Como yo lo siento más allá de mi silencio


Yo
La verdad es que mientras más adulta me voy sintiendo, menos gente dejo entrar en mi espacio. Con el pasar del tiempo y las tantas desilusiones, no aguanto, ni tolero faltas de respeto, ni que quieran invalidar mis sentimientos. Mientras más adulta, menos drama quiero en mi vida. Menos deseo entrar en otros mundos. Mientras pasa el tiempo, me doy cuenta que exijo más a la hora de permitir la entrada a mi corazón. Que ya no soy conformista. Que no estoy dispuesta a tener menos. Que prefiero estar tranquila, sin nadie que entorpezca mi felicidad. Que ya no pongo a nadie en un pedestal. Ya no quiero ser la mujer perfecta. No me interesa agradar a los demás, no lucho por ser la número uno en todo, y me conformo con un tres o cuatro. ¿Y qué, si mi cabello no es perfecto? Si no soy el estereotipo que todos buscan, o si hago dramas, y no puedo quedarme callada cuando algo no me parece bien. Simplemente es lo que soy, no busco quedar bien con nadie, me amo tal cual y me siento feliz y orgullosa de todo este conjunto de defectos para algunos, que para otros pueden ser virtudes, y que para mí, es ser auténtica y las únicas expectativas que tengo ahora son mis propias metas por cumplir.